Hotel con encanto a las puertas de los Picos de Europa.

Asturias fue uno de los pocos bastiones visigodos que se salvó de la conquista musulmana cuando las legiones de Tariq y su lugarteniente Musa se adueñaron de casi todo el territorio peninsular en pocos años. Si a este aliciente histórico le sumamos la gran belleza natural de los Picos de Europa obtenemos un emplazamiento excepcional para un hotel con encanto.

Situada dentro del término municipal de Mestas de Con, esta propiedad dista escasos kilómetros de Covadonga, una pequeña parroquia íntimamente ligada a la Historia de España. No en vano, poco después de la práctica anexión de la Península Ibérica un grupo de astures se rebelan contra la autoridad impuesta en la región, el gobernador Munuza, así como contra el pago de nuevos impuestos. Rápidamente, el malestar se extendió hasta otras poblaciones asturianas y del norte de la actual Castilla y León, sumando nuevos rebeldes a la causa. No obstante, este pequeño mando militar difícilmente podía compararse con las fuerzas musulmanas.

Cabe señalar que, contrariamente a lo afirmado por las fuentes cristianas más antiguas, el ejército musulmán enviado desde el sur peninsular para socorrer la posición de Munuza no superaba los 100.000 efectivos, a pesar de lo cual la superioridad numérica de las fuerzas de Al-Ándalus era innegable. Finalmente, en algún momento de la primavera de 722, varios centenares de soldados cristianos comandados por Don Pelayo pusieron en jaque a la columna musulmana beneficiándose de su conocimiento del terreno en Covadonga. La inesperada victoria cristiana motivó la huida y posterior muerte de Munuza y la liberación de Gijón, que de este modo se convertía en la principal ciudad cristiana de la Península.

Tan popular episodio, relatado infinidad de veces como el inicio de la Reconquista, ha conferido a Covadonga y a Cangas de Onís una gran notoriedad y un atractivo turístico innegable. El hotel con encanto apenas tiene diez años de antigüedad y en 2012 fue reformado y ampliado, mejorando así las prestaciones ofrecidas a sus huéspedes. El edificio principal es una antigua casona asturiana y cuenta con 27 habitaciones, incluyendo comodidades como hidromasajes, calefacción o televisión con DVD. Otros servicios colectivos son el spa y el notable restaurante.