Canarias y sus fincas singulares en venta

Qué caracteriza a la arquitectura canaria: materiales y estilo para un lugar encantador

La arquitectura canaria está marcada por los primeros pobladores que llegaron a las islas después de la Conquista, a lo largo del siglo XV.

Fueron muchos los pueblos que ocuparon el archipiélago y dejaron su impronta cultural a través de diferentes construcciones.

Al mismo tiempo, el paisaje volcánico y la actividad agrícola también han definido el tipo de viviendas de los habitantes en las zonas más rurales.

Por qué es especial la arquitectura canaria

La arquitectura en Canarias se caracteriza por tener un estilo austero, sencillo y funcional, con pocos elementos accesorios, pero con unas líneas sobrias que inspiran robustez y encanto. Estas primeras construcciones (pues los antiguos guanches vivían en chozas y cuevas), fueron levantadas por los diferentes pobladores que llegaron tras la conquista.

Portugueses, ingleses, genoveses, castellanos, andaluces…, todos ellos dejaron su influencia de alguna forma en la cultura y el tipo de construcciones.

Sin embargo, se puede definir la vivienda canaria como práctica, diseñada para responder a las necesidades de sus moradores. Es por esta razón que se construyeron distintos tipos de casas según la localización, los materiales disponibles y el estilo de vida.

En la antigua sociedad canaria convivían distintos estilos de vida, y esto dio lugar a diferentes tipos de vivienda.

Las variaciones se reflejaban tanto en la arquitectura exterior como en el interiorismo. Parte de las diferencias están marcadas por factores socioeconómicos, que han quedado reflejados en lo que se conoce como arquitectura canaria culta o señorial, y la arquitectura popular, más sencilla y modesta.

También hay notables diferencias por causas del entorno, de ahí que encontremos una arquitectura rural (casas de campo) y otra arquitectura urbana (casas de ciudad).

Los materiales más utilizados en la arquitectura canaria son la piedra, la cal, el barro y la madera. Las piedras sin labrar se usaban para las casas más humildes, unidas con barro, mortero de cal y piedras pequeñas llamadas “ripios” para rellenar los huecos.

Cuando las condiciones económicas eran más favorables, se usaba piedra labrada, siendo especialmente apreciada la famosa “piedra azul” de las canteras de Arucas.

La cal y el barro se usaban para impermeabilizar, así como para construir pavimentos. La madera también tiene un gran protagonismo en techos, balcones, ventanas, escaleras y puertas, siendo la del pino autóctono la más utilizada. Era un material costoso, así que solo se empleaba en las casas de familias pudientes.

Viviendas y edificios típicos de Canarias

Como veíamos, la arquitectura tradicional canaria tiene un estilo de vivienda funcional y sencillo. Destacan, por su singularidad, las casas cueva; la casa terrera (de una sola planta), y la casa de dos plantas.

Casas cuevas

Las casas cuevas eran habituales en algunas islas desde antes de la Conquista y era el lugar donde se refugiaban los aborígenes del archipiélago.

Podían estar excavadas en la roca o aprovechar oquedades naturales de la piedra. Tras la conquista, los colonos más pobres decidieron aprovecharlas, ya que tenían unas buenas condiciones para seguir siendo habitadas.

Hasta mediados del siglo XX los isleños siguieron excavando para ampliar las viviendas y construir espacios separados. Algunas incluso tienen huecos en las paredes de roca para servir como alacena y almacenar objetos.

Hoy día hay casas cuevas reformadas que cuentan con elementos modernos, y en otras, se ha construido parte de la casa hacia el exterior, partiendo de la cueva.

Casa terrera

La casa terrera, conocida también como casa de una sola planta, es el tipo de vivienda más popular en Canarias. Se pueden encontrar viviendas de este estilo con azotea o con tejados a dos o cuatro aguas.

Estas casas podían albergar a familias de cualquier estrato social, aunque su diseño variaba un poco según el nivel económico del dueño.

• Las más humildes se construían en solares pequeños, y eran de dimensiones más reducidas, con una o dos habitaciones.
• Las de los residentes más adinerados, destacaban por su distribución y su tamaño. Contaban con una recámara en la entrada y un amplio zaguán. También tenían un patio trasero (o traspatio) donde podía construirse un pozo, y una zona para animales.

Lamentablemente, se conservan pocas edificaciones de este tipo anteriores al siglo XIX.

Casa de dos plantas

En la arquitectura popular canaria también encontramos la casa de dos plantas, que era la casa señorial de la época, donde vivían las familias más importantes de las islas. Se construyeron tanto en zonas rurales como en núcleos urbanos.

• Las de campo, se situaban en enormes fincas de explotaciones agrícolas.
• Las viviendas urbanas se ubican en las proximidades de la Iglesia o en la plaza principal del pueblo o ciudad. Eran viviendas fabricadas con materiales de gran calidad que destacaban por sus grandes dimensiones y sus imponentes fachadas.

Como puedes ver, Canarias cuenta con una arquitectura tradicional única y especial. Aunque cada isla es diferente, todas ellas cuentan con viviendas cargadas de historia y de encanto, en entornos naturales excepcionalmente bellos o en pequeños pueblos pintorescos.

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