Cáceres. Casa señorial histórica en venta.

Singular propiedad emblemática de estilo gótico original del siglo XV.

La llamada casa del Águila de Cáceres debe el nombre con que tradicionalmente se la denomina a la que aparece en el escudo que preside la entrada principal, perteneciente al antiguo linaje de los Sande a cuyos más preclaros vástagos perteneció desde su erección en el siglo XV por D. Ñuflo de Sande, reinando Juan II.

En ella nació el más ilustre descendiente de aquel, Álvaro de Sande, que re distinguiría en el reinado del Emperador Carlos V y de Felipe II como eminente general de los tercios españoles estando presente hasta muy avanzada edad en las más importantes jornadas de las campañas europeas así como en el desastre de los Gelves, ya con setenta años- había nacido en 1489- en que murió su sobrino Jerónimo de Sande junto a lo más granado de la joven nobleza cacereña.

Se distinguió en la batalla de Mulhberg. Fue gobernador de Milán, lo que le valió ser nombrado Marqués de la Piovera y de Valdefuentes.

La casa es el fruto de la ampliación de otra de principios del siglo XIV, de la que se conserva el torreón defensivo incorporado a la nueva edificación, así como algunos fragmentos de la estructura muraría.

Está situada en el centro del casco intramuros de la ciudad, declarada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, en el barrio Alto, inmediata a la Iglesia de San Mateo, en que se conserva la capilla funeraria de los Sande y a la llamada torre de Plata.

Limitada por dos calles convergentes y confluentes en la plazuela de la Monja en que se abre la entrada principal, presenta un acusado chaflán que junto al escudo de armas ya aludido y una muy original ventana gótica, la caracterizan.

La planta del edificio tiene forma poligonal, aproximada a un trapecio isósceles cuya base menor es el chaflán y la mayor con el pequeño jardín que es medianero con el patio de la casa de Aldana.

La casa se desarrolla en tres plantas y un ático abuhardillado, unidas por una escalera que hasta la primera planta es la que existía antes de la reforma, con balaustres, pasamanos y arranque renacentistas de granito, completándose en los tramos superiores con elementos de mármol blanco, pavimento que se alterna con la tarima antigua de castaño. De esta misma madera –barnizada o lacada según los casos- está constituida el resto de la carpintería de puertas y ventanas, si bien estas se ven protegidas por otra exterior metálica.

Los huecos de fachadas, al haberse mantenido en la restauración, conservan las características originales, con rejas de forja en algún caso originales.

El escudo sobre la entrada principal presenta la originalidad, frente a la generalidad de la amplísima representación que este noble ornamento tiene en la ciudad de estar labrado en alabastro y no en granito como aquellos, planteando un refinado contraste con la arquitectura del entorno y estableciendo con su diseño de gusto intensamente renacentista un sutil diálogo con la ya aludida ventana gótica enmarcada en un arrabá de igual granito que la constituye y con la sobriedad general del conjunto.

La planta baja alberga en primer término la cochera, con el enmarque de la puerta original sobre el que hay un pequeño y sencillo escudete de cantería, sin duda del linaje

Aldana. A continuación y sobre el mismo paño del muro, la puerta principal de la casa de austero jambeado y dintel de granito sustentando el escudo de Sande – Águila exployada y cebada de ramo de olivo circundada a modo de bordura del cordón de San Francisco - da acceso al zaguán desde el que se comunica a través de un pasillo con la cochera. También en él se sitúa el acceso al aljibe abovedado y manantial que sin duda abastecía a la casa.

Frente a la entrada se abre la sala de billar con antigua chimenea de mármol verde de volutas y remates en puntas de diamante, que a su vez da paso a dos habitaciones con baño, a la salida a la calle de Orellana y al patio con galería abovedada, desde el que arranca la torre defensiva con ventana de arco y baquetones, característica de las casas fortificadas de Cáceres y desmochadas por mandato de Isabel la Católica en evitación de las endémicas luchas de los distintos bandos de la ciudad a lo largo de la Edad Media.

También en el zaguán se sitúa el arranque de la escalera con gran bola herreriana sobre pedestal, se continúa en la balaustrada que constituye el primer tramo de aquella y que conecta con la siguiente planta a través de un amplio rellano de mármol desde el que se accede a salón principal pieza que se desarrolla en dos alturas albergando la parte superior la biblioteca a la que se asciende por escalera abalaustrada de madera. En el nivel inferior con ventanas a las tres fachadas, hay una chimenea del S. XVII de mármol de Carrara de fina labra en volutas de acanto y garras de león. Simétrica a la que comunica con la escalera se abre puerta de acceso al cuarto de estar al que también se llega desde aquella por sendas puertas, todas ellas de cristales y palillería de madera lacada.

Esta estancia tiene amplio ventanal a la calle de Orellana completando su iluminación mediante doble puerta cristalera que comunica con la terraza abalaustrada que se vuelca sobre el patio y le sirve de prolongación.

Desde el estar se pasa a través de un distribuidor con armarios empotrados a sendas habitaciones que comparten un cuarto de baño.

Esta planta se completa con el área de servicio con oficio, cocina, cuarto de plancha, despensa y aseo.

La planta segunda en que ya dijimos que sobre el salón, se ubica la biblioteca a la que también se pasa desde la escalera a través de un cuarto de paso que alberga también otra de madera que nos lleva a la buhardilla.

En el centro del rellano se abre la puerta del dormitorio principal que a su vez da paso a un vestidor desde el que se pasa a un amplio cuarto de baño. Este dormitorio abre luces a la terraza por medio de una gran cristalera que ocupa casi todo el paño de conexión con ella, a la que puede también llegarse desde la escalera.

Esta terraza disfruta de unas vistas inmejorables sobre toda la ciudad histórica, la Montaña y la llanura cacereña con el majestuoso fondo de la sierra de Gredos.

Sobre la zona correspondiente a la torre y ocupando todo el perímetro de la misma, hay instalada una piscina.

Finalmente la buhardilla constituye el último cuerpo de la casa y contiene un dormitorio con un baño y un estudio con amplios ventanales abiertos a la terraza que comparte con ella las vistas descritas.

La casa dispone de instalación de calefacción y de aire acondicionado por bomba de calor frío y caliente sectorizada.

Puede visualizar más fotografias y planos en el siguiente PDF.

Más información en contacto directo con la propiedad, cumplimentando el formulario que se encuentra al final de este anuncio.